Y no... “Perdón, te tenemos que interrumpir. No más preguntas personales, por favor”. La charla telefónica con Selena Gómez es interferida por la voz de alguien que estaba escuchando la conversación y que decidió que ya era suficiente con lo que la chica había dicho de Justin Bieber. Lo que había dicho era: “Lo conozco desde siempre, hemos sido amigos y seguimos siéndolo”. Desde el vamos, la consigna de la gente de prensa fue “Nada de preguntas personales”, entendiendo por “preguntas personales” todo lo que se apartara de la música o, más bien, todo lo que se acercara a Justin Bieber. Se ve que no confían en la capacidad de Selena de decir por sí misma “de eso no hablo”.
A ella se la escucha cansada: “Estuvimos viajando mucho y es todo un poco ajetreado”, explica. Habla desde Santiago de Chile, donde acaba de actuar, y está por viajar a Lima. Después le tocan Río de Janeiro, San Pablo, Córdoba, Buenos Aires y Montevideo. El tema fans le resulta muy importante: a ellos les dedicó sus tres discos. En el último, When The Sun Goes Down , ellos aparecen segundos en la dedicatoria, sólo detrás de Jesucristo. Y para que quede bien claro, lo escribe en mayúsculas: MY FANS. En ese tema, sí se explaya: “Amo a mis fans. Mi música es para mis fans. En primer lugar, no esperaba que fueran tantos y, segundo, no esperaba que fueran tan locos, apasionados, divertidos. No los subestimo: ellos me enseñaron, me enseñan y me hacen mejor persona”. Cuando se le pregunta si se siente un modelo para las nenas y adolescentes que la siguen, responde como lora: “Me encanta lo que hago, y es absolutamente para mis fans. Quiero hacer todo lo mejor que puedo, pero no soy perfecta. Nunca trato de ser alguien que no soy. Si hay una oportunidad de representar algo en lo que no creo, no lo hago. Siempre trato de ser yo misma”. Dice que su vida viene transcurriendo a demasiada velocidad: “Siento que todo el trabajo que hice fue hecho muy rápidamente. Hice un programa, después la película, después mi álbum... El próximo disco será más personal, voy a trabajar muy duramente en el estudio”. De todos modos, anuncia que en lo inmediato se tomará “un recreo” de la música para dedicarse a actuar en dos películas: la primera será Spring Breakers , una película policial con James Franco. Asegura que no piensa mucho en qué será de su vida una vez que su nombre pase de moda: “Siempre me comporto como si hoy fuera el último día y después todo se terminara. Trabajo duro y trato de asegurarme de tomar las decisiones correctas. Mientras tanto, disfruto el presente”.
(clarin.com)
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