Fanfic: Summerboy 2da temporada capitulo 20.

Reí, "Ok, pero ahora yo estoy cansada" dije mientras lo esquivaba y entraba a el baño. Cambie mi ropa a un pijama y salí del baño, Justin me esperaba fuera del baño con una sonrisa de oreja a oreja "McLovin, te tengo una sorpresa" "Justin ya te dije que estoy muy cansada, vamos a dormir y..." Me corto y no me dejo completar la oración "Nos vamos de viaje mañana, deberías empezar a empacar desde ahora" "Pero ¿a donde?" dije desconcertada "Es una sorpresa" "Beaver, dime" dije con la voz mas dulce que mis cuerdas vocales pudieran pronunciar "Aunque es casi un insulto, amo cuando me llamas así. - dijo tomándome por la cintura y acercandome a él- Mañana nos vamos a divertir, eso te lo aseguro". Fruncí el ceño. "¿Qué?" preguntó al darse cuenta de mi expresión. "Quiero saber" volteó los ojos y rió. "Lo sabrás mañana, no seas tan impaciente Mclovin" susurró y me dió un beso en la mejilla. Se separó de mi y caminó al área de la cocina. 

Esta suite era una maldita casa. 

"Voy a comer algo, ¿tienes hambre?" me dijo mientras buscaba en el refrigerador. "Ehh, depende" Me miró esperando a que continuara. "Si es uno de tus sándwiches especiales a los que les pones todo lo que encuentras, no", movió la cabeza de lado a lado como si estuviera loca y siguió buscando. "Sabes que es delicioso" "Por supuesto, Justin" dije ríendo. "Supongo que pediré servicio a la habitación." dijo para sí mismo mientras yo me lanzaba en una sofá cercano. "Pensé que tenías sueño." "Ya no" alzó sus cejas de forma sugestiva y le lancé un cojín. "¿Es en lo único que piensas?" le pregunté conteniendo la risa. "Básicamente" bromeó y me levantó del sofá para sentarme sobre su regazo y me acercó aún más a él por la cintura. Lo besé y me separé de él rápido. "¿Me vas a decir?" "No" sonrió. "Pero sé que te va a encantar" me intentó besar de nuevo y lo esquivé. "Voy a dormir" me levanté y él hizo lo mismo. "¿Vienes?" le pregunté mientras caminaba a la habitación. "Depende" dijo en forma seductora. Bueno, lo que él pensaba que sonaba de esa forma. "No, Justin" "Creo que voy a pedir servicio a la habitación, después voy a dormir" asentí y él me dió un beso. "Buenas noches, amor. Haz tu maleta" "Adiós Beaver" le sonreí y asentí. Sí claro, hacer mi maleta. Mañana.

Justin Bieber.

Puedo jurar que no hay nada más adorable que Lauren durmiendo. Siempre boca abajo, sin darse cuenta buscando una forma de abrazarme o tomar mi mano. Al principio pensé que era a propósito y estaba despierta, pero sucede casi todas las noches. 

Eran como las 6 de la mañana y si yo estaba luchando por levantarme por completo no me podría imaginar a Lauren en unos segundos. Ella definitivamente no era una persona que amara las mañana, especialmente a esta hora. "Mclovin" susurré un par de veces. Nada. "Mclovin" repetí subiendo el tono de voz cada vez más. Luego de unas 20 veces comenzó a moverse y a quejarse. "¿Qué mierda hago despierta a esta hora?" dijo apenas logró abrir los ojos. Por supuesto, lo primero que vió fue la ventana con el cielo oscuro. "Nos vamos de viaje, ¿recuerdas, amor?" "¿Y nos vamos a las dos de la mañana?" "Son las seis, Lauren" Tomó una gran bocanada de aire y sentó en la cama a mi lado. Poco a poco se le cerraron los ojos de nuevo y comenzó a dormirse. "Laureeeen" canté y ella abrió los ojos de nuevo. "Tengo mucho sueño" "Puedes dormir en el viaje, ahora levántate, vamos a arreglarnos. Ya quiero llegar."

La verdad es que había planificado un viaje completo. Ayer cuando llegué del bar, decidí hacer esto para olvidarnos del imbécil de John y estar solos. 

No del todo solos, porque irían Sean y algunos de sus amigos, pero algo así. 

Íbamos a Santa Bárbara, pensé ir para allá porque en uno de esos días en el campamento cuando Lauren y yo comenzamos a salir, al hablar de sus padres y de su familia dijo que lo único lindo, aunque nunca se los había dicho, era ir a Santa Bárbara la última semana de la vacaciones a casa de su abuela. Cuando iba con sus primos y jugaban todos en la arena. Por eso ama tanto la playa. Pero al comenzar los problemas de sus padres poco a poco dejaron de ir, o siquiera hacer cosas juntos. Se distanció y luego de un año faltando a clases cada tanto y yendo a detención a diario, fue cuando sus padres decidieron mandarla al Casa Feliz.

En fin, al cabo de una media hora Lauren y yo estábamos listos. Ella tenía unos shorts, una blusa caída en el hombro blanca, un gorro y botas, estaba tan hermosa. Incluso vestida con una bolsa de plástico se vería totalmente perfecta. "¿Qué pasa? ¿Estoy bien?" me dijo cuando se dio cuenta de que estaba mirándola desde hace rato. "Lo usual, eres muy hermosa" "Comienzo a creer que te gusto" dijo riendo y sonreí, "No puedo creer que te diste cuenta", le respondí y le di un beso en la mejilla mientras comenzábamos a tomar todas nuestras cosas. Cuando llegamos al lobby nos ayudaron con el equipaje. Kenny estaba esperándonos en el auto. 

Cosas malas de ser famoso? No poder ir a la playa solo con tu novia. Por lo menos era Kenny, y no mamá.

Nos pusimos nuestras gafas y salimos ignorando los flashes de las cámaras al entrar al carro. 

Durante todo el camino Lauren estuvo dormida en mi hombro, mientras yo hablaba con Kenny y otro de seguridad que no conocía. 

De todas formas, el camino hasta Santa Bárbara es cortísimo y vamos a llegar antes de las 8 de la mañana..

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Lauren Lovin:

Desperté sentada en el carro con Justin a mi lado, oyendo a todo volumen alguna canción de rap con los ojos cerrados y moviendo su cabeza de arriba a abajo - de lado a lado. No pude evitar reírme, se veía demasiado concentrado. Por alguna extraña razón -ya que estaba oyendo la música más alta que nunca, me oyó reír y volteó a verme. "Te despertaste" sonrió. Asentí con la cabeza y aparte unos mechones de cabello de mi rostro. 

Los paparazzis duraron unos segundos apenas para atacar nuestra camioneta. La golpeaban y no nos dejaban movernos. Justin me abrazó y puse mi cara en su cuello, los flashes me comenzaban a dar dolor de cabeza.

Llegamos a un semáforo y ellos seguían pegados a los vidrios intentando obtener una buena foto. "Disculpame por eso McLovin" dijo Justin "No es tu culpa" él iba a volver a disculparse cuando lo detuve. "Ni se te ocurra seguir culpándote. Maldita sea Justin, no es tu culpa. Ni me importa, o sea son molestos y los desprecio pero no podemos hacer nada. Y detesto que te culpes." Dije frustrada. "Lo sé" susurró y pasó su brazo por mis hombros. "Ya no hablemos de eso. Ahora dime, ¿dónde estamos?" Dije ignorando las luces de las cámaras que nos cegaban. "Espera y verás". Me aparté de él y busqué en mi bolso mis lentes de sol. 

Como habían carros alrededor de nosotros, y ya estábamos llegando a la ciudad -que todavía no sé cuál es, no podíamos pasar a los fotógrafos desquiciados. "JUSTIN, JUSTIN, LAUREN, LAUREN CÓMO LES VA?" "YA TE QUITARON TU LICENCIA JUSTIN? O NECESITAS GENTE QUE MANEJE POR TÍ?" "LAUREN LAUREN LAUREN, MÍRANOS, SONRÍAN!" Decían los putos.

"No aguanto más Jay" Los miré y sonreí como si está fuera mi foto de promoción del anuario, y por supuesto les mostré el anillo que lucía mi dedo medio. Justin, rió y pasó su brazo por mis hombros. "Te amo" me susurró en el oído. "Yo también" dije tomando su mano y jugando con sus dedos en los míos. Ya habíamos dejado a los paparazzis atrás cuando pasamos por un atajo. 

Cuando llegamos a la ciudad, lo supe, simplemente lo supe.

Estábamos en Santa Bárbara.

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Las últimas horas había estado con Justin, y sus amigos en la piscina de la hermosa casa en la que nos quedábamos por estos días. Algunos estaban dentro de la piscina, incluyendo a Justin que tenía la cabeza apoyada en el borde de la piscina con mis piernas a sus lados. "¿Quieren ir hoy a un bar que queda cerca? Es muy exclusivo, no creo que nos moleste nadie" "No tengo ganas" dije levantándome. "Sí, bueno, yo tampoco" le respondió Justin a Sean, luego me miró y me guiñó el ojo. 

Creo que malinterpretó lo que quise decir.

Los demás salieron de la piscina para arreglarse y yo entré. "Hola" susurró Justin con una sonrisa mientras yo me acercaba a él. "Hola" le respondí cuando me colgué de su cuello y él tomó mi cintura. "¿Qué quieres hacer hoy?" hundí mi cabeza en su cuello. "Pensé que estabas muy cansada como para salir" me respondió. "Es que quiero estar contigo hoy." susurré. 

Me recuerdo cuando era alérgica a estos momentos cursis.

Cuando debatía en mi cabeza al pensar en las cosas que amaba de Justin. 

Cuando pensaba que nunca le diría que lo quería. 

Look at me now.

Tomó mi cara en sus manos y me beso. "Está bien, podemos ir a caminar" sonreí todavía con los ojos cerrados. "Me voy a cambiar."

Subí las escaleras hasta mi -nuestra- habitación y tomé una ducha rápida. Sequé mi cabello y dejé caer mi largo cabello en mi espalda. Me puse un vestido corto oscuro con estampado y unas sandalias marrones. Me maquillé un poco, tomé mi teléfono y salí de la habitación. 

Cuando yo salí Justin estaba por entrar. "Estás hermosa McLovin -sonrió y me dió un beso en la mejilla- me arreglo rápido, ya bajo". Bajé a la planta baja de la casa, ya había oscurecido y la vista desde las puertas panorámicas daban hacia la piscina, y al fondo la ciudad alumbrada por las luces de los carros y los edificios. Hermoso. 

Comencé a buscar en la nevera algo de comer, Justin llego detrás tomándome de la cintura "¿A donde quieres ir hoy preciosa?" dijo mientras besaba mi cuello "Hoy dejare que tú seas mi guía" dije volteándome hacia él. Justin bajó la mirada para verme a la cara. Simplemente no habían palabras para describir estos momentos, con él todo era perfecto, quien creería que yo, Lauren Lovin algún día estaría tan locamente enamorada de alguien. "Lauren, te amo" dijo mirándome fijamente a los ojos "Y yo más a ti" dije aún mirándolo a los ojos "Es que no lo entiendes Lauren, yo no te amo, yo siento algo más que amor por ti, es algo que ni con mil palabras podría describirlo, es algo tan profundo. Tu eres...mi vida Lauren, lo eres todo" Estaba perdida en su mirada y en sus palabras, cosas como esas me hacían amarlo cada vez más, aunque lo veo un poco imposible porque lo amaba hasta el límite, no creo que se puede amar más a alguien tal como lo amaba yo a él. "Y tú eres mi vida Beaver" sonreí y me paré con la punta de mis pies para darle un beso. Él me alzó por la cintura mientras yo me colgaba de su cuello. De repente se nos olvido dónde estábamos y Justin me sentó en la barra alta de la cocina; halé su camisa y lo acerqué aún más hacía mi. "Lauren" susurró apenas pudo. "Luego" Suspiró y me miró. "Me torturas de esta forma." Reí y me bajé de la barra. 

Creo que había aprendido a persuadir a Justin.

"Enséñame la ciudad, recuerda que vine hasta los 11 años. No recuerdo casi nada" le dije tomando su mano, "Los dos conoceremos entonces" me respondió y luego me dió un beso en la mejilla. 

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Caminamos por la ciudad, sí, habían cámaras pero no eran tan agresivos como en L.A. Era todo muy hermoso, y creí recordar una que otra esquina. Llegamos a una playa que estaba prácticamente sola, a excepción de los universitarios desenfrenados besándose con una botella de vodka o en algunos casos, cerveza en sus manos -sin insultar, considerando que soy una de ellos, y uno que otro solitario un sábado por la noche. 

Me senté con Justin en la arena sintiéndome Savannah de Dear John. No sé si la han visto pero existe una posición llamada, "La posición de Dear John" consiste en estar entre las piernas del chico, mientras él te rodea con sus brazos. "¿Alguna vez te dije que los mejores momentos de mi vida son contigo?" "Si, pero me gusta que lo repitas" dijo riendo. Ya me estaba poniendo demasiado cursi así que esto necesitaba mi toque personal. Me levante y le patee arena a Beaver mientras el seguía sentado y comencé a correr "Estas me las pagas" dijo mientras se levanta y corría detrás de mi "Primero me tienes que alcanzar" dije riendo, y bueno Justin corre 5 veces más rápido que yo. Me tomo de la cintura por detrás y me alzó. Los dos reíamos sin parar. 

"Imbécil, suéltame, Justin bájame" dije entre risas, "Tienes que decir la palabra secreta", "¿Palabra secreta? ¿En dónde estábamos, sexto grado?" "Sólo dila" "No sé cuál es la maldita palabra Beaver." "Sí la sabes" "Si no me bajas en éste instante te vas a arrepentir Justin" dije tratando de sonar seria, pero la situación era muy graciosa como para no reírme. "Tienes que decirme la palabra, esa es la única forma" Suspiré y me fucilé la cabeza pensando cuál era la palabra. "Swag" susurré insegura. "Mierda. ¿Cómo supiste?" "Uhm quizás porque tienes una obsesión preocupante con decir swag." "No pensé en eso." Reí y voltee los ojos. Justin me bajó poco a poco y nos sentamos en la arena. "Juguemos 20 preguntas" Asentí y me acomodé. "Comienza tú" le dije y quité un mechón de mi cabello que me estorbaba en la cara. "Mejor película de todos los tiempos" Pensé un momento y reí. "500 Days of Summer. ¿La tuya?" "Lo supuse. Stepb.." "Brothers" culminé su oración y los dos reímos. En eso sonó su teléfono y los dos dejamos de reír. "Es un mensaje" Asentí. "Hay una fiesta, Sean dijo que fuéramos, que está todo el mundo" "Todo el mundo..es?" "Todos sus amigos de Miami vinieron" Asentí de nuevo y los dos nos levantamos y nos sacudimos la arena de la ropa. "Vamos" dijo sonríendo "Pero antes una foto para mi instagram ¿si?" dijo con la mirada más tierna del mundo "No Justin" "Anda no tengo fotos de mi hermosa novia en instagram" "Estas obsesionado con eso" dije riendo "Solo una ¿si?" dijo haciendo puchero "Ok una" dije poco convencida. Me dio un beso en la mejilla mientras tomaba lo foto, yo solo sonreí.

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Esto sí que era una fiesta. La casa -digo, mansión, en la que estábamos hace unas horas, estaba convertida en una de esas fiestas que no hacen caer el techo por su buena construcción. La música, hacía difícil poder oír tus propios pensamientos. Ya la mitad -o casi, de las personas estaban borrachas. Me hacía recordar a las fiestas a las que asistí en mi último año de preparatoria.

Justin me presentó por milésima vez, a cualquier persona que veía conocida, diciendo, "Ella es Lauren Lovin, mi novia" con esa sonrisa de oreja a oreja, haciéndome pensar qué coño lo hacía quererme tanto. Cada vez que un mesonero pasaba con tragos Justin tomaba uno, es decir por minuto se tomaba casi cinco "Yo no voy a recoger vomito, ¿ok?" "¿Cuál vomito? Lauren estoy bien. Ven acá" dijo tomándome por la cintura, aun estando alejada de el podía sentir el olor a vodka que salía de su boca. "Vamos a la piscina" dijo moviéndome con el y sentía como cada uno de sus pasos era menos estable, caminaba de espalda hacia la piscina mientras me halaba hacia él. "Justin..no quieres ir a comer algo?" "No, quiero meterme en la piscina..Ven" Me haló de la mano y siguió caminando hacía la piscina. 

Ya a este punto, -una hora de perseguirme por todos lados rogándome que por favor nos bañáramos casi desvistiéndome en el proceso, busqué un trago. 

Si no puedes contra ellos, únete.

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Desperté incomoda y adolorida aun con los ojos cerrados porque la migraña no me dejaba abrirlos, trate de pensar que en dónde coño estaba, hasta que sentí titilar constantemente una luz -que resultó ser del microondas; y decidí abrir los ojos, me di cuenta que estaba en la cocina para ser exactos sobre la barra. Cuando baje la mirada no encontraba el piso, ya que estaba cubierto por vasos rojos y amigos de Justin y Sean acostados en cualquier lugar existente en la casa. Toqué mi estómago y sentí un espacio sin tela. Había un hueco justo alrededor de mi ombligo. Ayer debió ser muy entretenido. Me baje de la barra y comencé a buscar a Justin por toda la casa, luego salí a buscarlo por la piscina.

Nunca me imaginé encontrarlo con la cabeza metida dentro de un arbusto. Ni siquiera quiero saber cómo coño llegó allí.

Caminé hacía él todavía cagada del dolor de cabeza, y no pude evitar reírme. ¿Quién se queda dormido con la cabeza dentro de un arbusto? 

Sólo él, definitivamente.

No lo pude evitar así que le tome una foto con mi iphone y la subí a mi instagram y coloque en la descripción de la foto "Resaca"

"Justin, despierta amor" duró un momento antes de reaccionar. "Huh" susurró tratando de moverse y salir del arbusto. Pero no podía.

No pude evitar reírme aún más.

"Ayúdame y deja de reírte Mclovin" dijo con ese tono con el que suena la voz de las personas cuando están tratando con todas sus ganas de no reírse. Lo ayudé a salir del arbusto y el comenzó a frotarse los ojos, su cabello era un desastre estaba todo despeinado, comenzo a caminar como si estuviera temblando. "¿Qué tomamos ayer Justin? Siento que el mundo está dando vueltas" "El mundo da vueltas, Lauren" "Muy gracioso Justin" "¿Por qué coño estabas dormido en un arbusto, de todas formas" dije mientras los dos caminábamos hacía la casa y nos sentábamos cuidadosamente en el mueble gigante, el cual, por alguna extraña razón estaba vacío. Al parecer las personas bajo influencia de alcohol -y quién sabe qué más, prefieren dormir encima de los bordes de las escaleras. "Quiero dormir en una cama. ¿Sabes dónde desperté? En la barra de la cocina." "Yo en un arbusto, creo que gano en el lugar más incómodo." reímos y nos callamos de golpe, por la migraña que nos daba martillazos en la cabeza. Por lo menos a mí. "¿Y ahora qué?" susurré en vista de que al hablar mi cabeza se sentía como si Jigsaw me torturara por haber bebido tanto. "Voto por comer y dormir" dijo Justin ya caminando hacía el refrigerador. "¿Sándwiches?" "Lo dices como si pudieras cocinar de todo." "No me hables así McLovin, yo sé cocinar muchas cosas." "Sándwiches, pasta.. sándwiches, pasta..." dije contando con mis dedos pulgar e índice una y otra vez. "Lo dices como si pudieras cocinar de todo" me remedó en burla y volteé los ojos. Claro, luego me arrepentí porque un millón de fuegos artificiales explotaron en mi cabeza como un 5 de Julio. "¿El de siempre?" me preguntó sobre el sándwich mientras sacaba cosas de la nevera. "Sip" dije pronunciando la P como si me vida dependiera de eso. Los terminó en un santiamén y en ese mismo período de tiempo comimos. 

Subimos y hablo sinceramente cuando digo que al acostarme en esa cama sentí como si fuera la más suave nube. 

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Resulta que nos levantamos a eso de las tres de la tarde, dando como resultado que nos despertáramos luego de la siesta a esos de las siete. "Mierda, ¿qué día es?" susurré mientras miraba la ventana, en la que el cielo estaba totalmente negro, raro en esta época del año. "¿Estoy vivo?" preguntó Justin frotándose los ojos y abriéndolos como platos. "No lo sé Justin" susurré algo dormida tratando de pensar con claridad. De verdad sentía que habían pasado dos años desde que encontré a Justin en un arbusto. Recordarme de sus intentos frustrados de salir de los arbustos me hizo reír de nuevo. "¿Qué pasa?" "Nada, sólo recordé que dormiste en un arbusto" dije apretando sus mejillas como cuando tenía 5 años y me hicieron esa fiesta en McDonalds, en la que todos mis tíos me hicieron pensar qué coño estaba mal con mis mejillas. "¿No los vas a dejar ir, cierto?" "Jamás" "Creo que fui a vomitar y me quedé allí." "Yo no tengo idea de por qué me acosté en la barra de la cocina, en todo caso", me levanté de un golpe y caminé al baño. "Creo que yo sí recuerdo" oí a decir a Justin. "¿Qué tan malo es?" "Depende de qué tan malo sería que tomaran tragos de tu abdomen." "Mierda. Eso explica el hueco en mi vestido." "Y creo que yo no dejé a los demás tomar." "No me sorprende" dije riendo y saliendo del baño. Él entró, y yo comencé a buscar qué ponerme. Shorts, blusa suelta color azul, unas sandalias de playa y un traje de bajo negro fue lo primero que vi entre mis cosas y como no tenía ganas de gastar energía buscando algo mejor, me vestí con eso. ¿Floja? No, para nada. Usé sarcasmo, en caso de que no supieran. "¿Vamos a la playa?" "Está bien" dije con mi cabeza atrapada en la blusa, la que pareció ser menos suelta de lo que pensaba. Sentí que la jalaron hacia abajo y luego vi la cara de Justin, a unos centímetros más altos que yo y a muchos menos de distancia. "Gracias" "No hay por qué" dijo y me dió un beso. Buscó nuestros celulares y tomó mi mano para bajar. 

"¡Decidieron dejar de consumar su noviazgo y bajar a vernos las caras!" "Estábamos durmiendo" dijo Justin golpeándolo en la cabeza y riendo. "Sí claro" dijeron los demás y yo reí. "La verdad es que llegamos hasta la 33, nos cansamos y nos quedamos dormidos." dije en broma mientras tomaba una manzana verde del mostrador de la cocina. "Creo que fue la 34, Lauren" dijo Justin siguiendo con mi broma y arrancando la manzana de mi mano. "Ey, devuélvela." dije sonriendo y tratando de quitársela. ¿Había comentado que era mala tratando de quitarle algo a alguien de la mano mientras este la mueva por doquier? ¿No? Bueno, ahora es público. Sean la tomó de la mano de Justin y se la comenzó a comer. "Es mía ahora." Volteé los ojos y lo golpeé en el brazo. "¿Nos vamos McLovin?" "¿Tan rápido se van? ¿No se cansan de verse?" bromeó uno de los amigos de Justin o de Sean que estaba en un sofá. Y aunque su comentario no tenía lugar en esta conversación, lo consideré unos segundos. Es decir, desde París, hemos estados cada segundo de todos los días juntos. ¿Eso es malo o bueno?

Escritoras: @Mafestarship y @pamelaovoxo

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